Es una de las impactantes frases que contiene el spot de la nueva campaña de Osiptel: El celular más caro del mundo.
Iba a hablar de otro tema en esta publicación, pero por cosas del destino vi el spot de esta campaña y decidí hablar de él. El 25 de agosto Osiptel lanzó la campaña “El celular más caro del mundo” y; a diferencia de tantos otros spots hechos por el Estado, en mi opinión; este fue bien ejecutado.
No cae en lo melodramático (el nieto abrazando el cuadro de la abuela, un spot que el MINSA lanzó el primer mes de cuarentena), da el mensaje claro y conciso, de manera impactante y frontal. Podríamos decir que es un spot que casi roza el humor negro y no está mal. Para dar un mensaje que funcione (en este contexto) no debe hacerse siempre desde el miedo o el alarmismo. No hay una sola forma de dar un mensaje, depende de la audiencia, del tiempo, el contexto, etc.
El aprendizaje
Parece que el Estado ha aprendido a asesorarse mejor en cuestión de comunicación, y es que no hay “marca” que tenga peor comunicación, mensajes y ejecuciones que El Estado. Sin embargo, ya entendió también que “meter miedo” no es la solución, mostrar a personas llorando no va sensibilizar a la gente que continúa sin tomar en serio a este virus; ya nos dimos cuenta que no funcionó.
Es por ello que este spot, en mi opinión, funciona y por eso lo comparto. Lo comparto con el fin de difundir un poco más la campaña, poner mi granito de arena para que las personas que lo vean sean más conscientes al momento de actuar.
Nos quejamos de la delincuencia y que el gobierno no hace nada por “aplacarla” y no nos damos cuenta que no está en manos del gobierno, está en nuestras manos.
No compremos celulares baratos
No compremos celulares baratos si sabemos de dónde provienen (en general no compremos objetos robados; sí, aplica para el emblema del auto que te robaron y que podrías encontrar a un “módico precio” en Tacora o La Diez).
Seamos conscientes y pongamos de nuestra parte. Hagamos que los spots del Estado resuenen y funcionen, que no se gasten en vano “millones” en hacer un spot que dura más de 1 minuto, que pautean dos semanas y luego nadie se acuerdo o si quiera lo vio. Como bien diría Calle 13 “Si quieres cambio verdadero, pues camina distinto”. No exijamos y nos quejemos que algo no cambia (mejora) cuando nosotros mismos no ponemos de nuestra parte.
